Aunque parezca complicada, la repostería crudivegana es bastante sencilla además de ser un gran alimento sin gluten. En su elaboración siempre están presentes los frutos secos como nueces, dátiles, almendras o anacardos. También se utiliza el aceite virgen de coco que, además de tener muchas propiedades, actúa como un potente aglutinante y el sirope de ágave, usado para endulzar. Por todo ello os dejo la receta de esta tarta crudivegana de fresa y plátano.

 

Ingredientes: (12 porciones)

 Base:

  • 2.5 tazas de nueces
  • 16 dátiles
  • 1 taza de coco rallado

 Capa de plátano:

  • 4 plátanos maduros
  • 1 taza de anacardos crudos remojados en agua la noche anterior
  • 2 cucharadas de sirope de ágave
  • 2 cucharadas de aceite de coco virgen derretido

Capa de fresa:

  • 300g de fresas
  • 1 taza de anacardos crudos remojados la noche anterior
  • 2 cucharadas de sirope de ágave
  • 2 cucharadas de aceite de coco virgen derretido
  • 1 cucharada de zumo de naranja
  • 1 cucharilla de extracto de vainilla

Preparación:

 Base de nueces:

  1. En la picadora o en un robot de cocina introducimos los dátiles deshuesados junto con las nueces y el coco rallado. Picamos hasta obtener una pasta homogénea y firme.
  2. Dividimos la pasta en dos partes iguales.
  3. Colocamos, en un  molde desmoldable cubierto con papel vegetal, una de las partes de la masa de nueces y dátiles prensándola bien con los nudillos para que quede firme.
  4. Reservamos la otra parte de la masa en la nevera.

Relleno de plátano:

  1. En un vaso batidor o una procesadora de alimentos, vertemos los plátanos en trozos, los anacardos escurridos, el sirope de ágave y el aceite de coco derretido. Trituramos hasta tener una masa homogénea y sin grumos.
  2. Cubrimos la base de la tarta con la crema de plátanos y anacardos e introducimos en el congelador durante tres horas.

Relleno de fresas:

  1. En un vaso batidor vertemos las fresas picadas, los anacardos escurridos, el sirope, el zumo de naranja, la esencia de vainilla y el aceite de coco.
  2. Trituramos y reservamos en la nevera.

Montaje final de la tarta:

  1. Pasadas las tres horas sacamos la tarta del congelador. Este paso se realiza para que la tarta coja consistencia y podamos hacer las diferentes capas con facilidad.
  2. Colocamos la parte de masa de nueces restante sobre la tarta, presionando suavemente con la palma de las manos para que quede una cubierta unifome.
  3. Cubrimos con la crema de fresas.
  4. Guardamos de nuevo en el congelador durante dos horas.
  5. Sacamos del congelador 20 minutos antes de comer y la decoramos con rodajas de fresa y grosellas.